Cambio climático: anomalías térmicas

El cambio climático se refiere a los cambios a largo plazo de las temperaturas y los patrones climáticos. Estos cambios pueden ser naturales, debido a variaciones en la actividad solar o erupciones volcánicas grandes. Pero desde el siglo XIX, las actividades humanas han sido el principal motor del cambio climático, debido principalmente a la quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas.


La quema de combustibles fósiles genera emisiones de gases de efecto invernadero que actúan como una manta que envuelve a la Tierra, atrapando el calor del sol y elevando las temperaturas.


Las emisiones principales de gases de efecto invernadero que provocan el cambio climático son el dióxido de carbono y el metano. Estos proceden del uso de la gasolina para conducir un coche o del carbón para calentar un edificio, por ejemplo. El desmonte de tierras y bosques también puede liberar dióxido de carbono.


La agricultura y las actividades relacionadas con el petróleo y el gas son fuentes importante de emisiones de metano. La energía, la industria, el transporte, los edificios, la agricultura y el uso del suelo se encuentran entre los principales emisores. (Fuente: Acción or el clima. ONU)



Este mapa codificado por colores en la proyección Robinson muestra una progresión de las anomalías cambiantes de la temperatura de la superficie global. Las temperaturas normales se muestran en blanco. Las temperaturas más altas de lo normal se muestran en rojo y las temperaturas más bajas de lo normal se muestran en azul. Las temperaturas normales se calculan sobre el período de referencia de 30 años, 1951-1980. El cuadro final representa las anomalías de la temperatura global de cinco años entre 2018 y 2022.